Spotify según una información de Financial Times, ha llegado a un nuevo acuerdo con las discográficas, por el que la plataforma limitará los nuevos lanzamientos solo para los usuarios de pago, los usuarios premium. La decisión es un paso que Spotify, el líder en los servicios de streaming, siempre se ha resistido a dar.
Spotify tiene actualmente 50 millones de suscriptores de pago y 60 millones en el servicio freemium. Como contrapartida, las discográficas estarían dispuestas a reducir los royalties que reciben por las canciones. Spotify siempre defendió el servicio freemium, como una manera de que el usuario conociera el servicio y diera el paso al premium, que son 9,99 euros al mes.
Sin embargo, otros servicios, como Apple Music, con 20 millones de suscriptores, Tidal con 4.5 millones, o Amazon, que se lanzó el año pasado, no tienen servicio freemium.
De cerrarse definitivamente el acuerdo, habría que ver cuáles son los álbumes o la música considerada premium, y sobre todo si habrá una ventana de tiempo, y de cuánto tiempo sería esa ventana de tiempo. A pesar de que el servicio premium ofrece más ventajas, que el freemium, y que este último tiene publicidad y cada día más, sigue habiendo mucha gente que no quiere pagar por escuchar música.
Las discográficas piensan que el servicio freemium afecta a las ventas de álbumes, artistas como Adele, no cedió 25 a las plataformas hasta meses después de que su disco apareciera. Y Coldplay y The 1975 o Jason Aldean, congelaron una o dos semanas el disco, antes de darlo a los servicios de streaming. Spotify defiende que la mayor parte de los usuarios que llegan al premium, vienen del freemium.
La plataforma sueca llevaba meses negociando con las discográficas (Sony, Universal y Warner) un nuevo acuerdo, ya que el que tenían estaba caducado y trabajaban mes a mes. Habrá que esperar a un comunicado oficial, y tener todos los detalles.