Ha fallecido a los 87 años, a punto de cumplir los 88, el ejectivo musical Walter Yetnikoff. En su etapa de mayor esplendor, nada en la industria se movía sin que él lo supiera. Dirigió con mano férrea la nave de CBS Records como CEO y presidente de 1975 a 1990.
La convirtió en la discográfica #1 a nivel mundial, y a él, en el ejecutivo de la década. Yetnikoff atesoraba todo lo que necesitaba un presidente de discográfica para triunfar, ser un tiburón, ser el tiburón.
Nacido un 11 de agosto de 1933 en Brooklyn, Nueva York, se unió a CBS en 1962 trabajando con el productor y ejecutivo Clive Davis como abogado consejero.
Clive sería presidente de Columbia de 1967 a 1973 antes de abandonar para fundar Atlantic Records. Yetnikoff aprendió de otro de los grandes mogules de la industria. Antes de marcharse, en 1969 Clive ya había nombrado a Walter vicepresidente de CBS Records Internacional, y en 1971 era el presidente.
En 1975 fue nombrado presidente de CBS Records y comenzó su reinado. Al ser abogado se las sabía todas, y lo primero que hizo fue quitarle a Warner a James Taylor, que comenzó a ser un big seller con su primer disco para CBS. Hizo lo mismo con Paul McCartney y con EMI. CBS pasó a distribuir los discos del ex-beatle en Norteamérica.
Yetnikoff sería pieza clave en los duetos de Paul McCartney y Michael Jackson en los años 80, además de Ebony and Ivory junto a Stevie Wonder. También fue clave en juntar a Barbra Streisand junto a Barry Gibb, que lanzaron Guilty, que terminó siendo el álbum más vendido en toda la carrera de Barbra.
Tras haber triunfado con Off the wall, Michael Jackson lanzó Thriller en 1982, la MTV no ponía vídeos de artistas negros, Walter presionó y presionó y la MTV cedió y comenzó a poner Billie Jean, el resto es historia. En los Grammy de 1984 cuando Michael ganó 8 premios, Michael subió al escenario a Walter, diciendo, es el mejor presidente de cualquier discográfica.
Ayudó financieramente a Billy Joel que se convirtió en uno de los artistas de mayor venta mundial en los años 80 y por supuesto, también fue pieza fundamental en la consolidación mundial de uno de los pilares de CBS, Bruce Springsteen.
Pero además llevó a sus cotas más altas a Chicago, Earth Wind & Fire, Gloria Estefan, Boston o los Clash, por citar algunos. Se trajo a los Rolling Stones de los años 86 al 91 y firmó a Mick Jagger como artista en solitario y trajo de nuevo a CBS a Bob Dylan.
En 1988 fue el arquitecto de la fusión de CBS con Sony, que daría lugar a Sony Music Entertainment. Gracias a sus años de trabajo con la marca japonesa, llevó directamente la venta de CBS, siendo la primera vez que una marca japonesa compraba una gran empresa norteamericana.
En 1990 decidió dejarlo, y llevó a la presidencia de Sony, al que entonces era su protegido, a la persona que había elegido él, un tal Tommy Mottola, que ya estaba trabajando con una cantante muy prometedora, que se llamaba Mariah Carey.
Su autobiografía Howling at the Moon: Confessions of a Music Mogul in an Age of Excess, publicada en 2004 es lectura obligada para todo aquel que quiera entender cómo funciona el negocio.