Aitana deslumbró en los Goya, deslumbró en la alfombra roja con un vestido blanco de Versace, y deslumbró con su actuación en la gala con el Happy days are here again, una canción con una enorme trampa.
Petición expresa de Antonio Banderas, Happy days are here again es una canción de 1929 de Milton Ager y Jack Yellen, que apareció cómo no, en una película en 1930, Chasing rainbows.
Entonces y como era menester en la época dorada de los musicales y de las big bands, por Leo Reisman y su Orquesta, pero es una canción que todo el mundo asocia con Barbra Streisand y eso que hasta que la cantó Barbra, todo el mundo también la asociaba con la campaña presidencial de Franklin D. Roosevelt en 1932.
Sin embargo Barbra decidió incluirla en su primer álbum en 1962 The Barbra Streisand Album, y aunque no entró en listas fue su primer gran éxito. La canción luego ha sido un clásico de la cantante en sus conciertos, como One Voice en 1987 o frente a 135.000 personas en Central Park en 1967.
Por eso era un regalo envenenado de Antonio Banderas, pero como suele suceder también en estos casos, si te sale bien triunfas. Y así sucedió, con la Orquesta Sinfónica de Málaga como acompañamiento, Aitana tuvo su actuación estelar en la gala, y superó con nota cantar una canción que todo el mundo asocia, con quizás la mejor cantante que haya existido nunca si hablamos del pop, como es Barbra Streisand.
Hay momentos en el tono de la canción, en el que salvando las distancias la voz de Aitana tiene cierto deje a la de la neoyorkina. De hecho las versión lenta del tema que es como la cantó Aitana, es como la canta Barbra.
Aitana estuvo segura en los apenas 3 minutos que duraba la canción, y sorprendió con un registro alejado del pop que nos tiene acostumbrados, pero que en el fondo es el pop clásico, y el pop del que todo artista debe beber, aunque sea una vez en la vida.
TVE rotulaba en la previa a Aitana, como la de OT 2017. Con más de 2 millones de canciones vendidas en España en poco más de 3 años y actuaciones como la de ayer, quizás ese latiguillo comience a sobrar ya.