Siempre me ha llamado la atención de Ricky Merino el buen gusto musical del que hace gala. Sus tres canciones hasta la fecha beben del buen gusto del pop bailable, el pop europeo y sobre todo del pop británico. Perfecto es una canción que podría haber salido en UK a finales de los 90 o principios de los 00. Tiene absolutamente todos los tics reconocibles de una de las etapas más brillantes, del casi siempre por otra parte brillante, pop británico.
En esos años artistas como Another Level, Five, Craig David, A1, Blue, Will Young, Darius, Gareth Gates o Daniel Bedingfield, tenían un sonido parecido, con diferencias está claro, pero un sonido el que mezclaban el pop, con el R&B, con las bases sampleadas, con riffs muy reconocibles y en muchas ocasiones añadiéndole el dance. Perfecto no habría desentonado en absoluto en esos años. Y hay que reconocerle a Ricky que explore esos sonidos y lo haga de esa manera, incluso se le podría pedir que metiera algo más de dance, algo más de BPMs.
Ricky vuelve a confiar en Jake Boncutiu para la producción, para ese sonido británico en esta ocasión, y vuelve a acertar. Es delgada la línea entre lo que significa funcionar o no funcionar, tener éxito o no tenerlo, y aunque los números de momento no acompañen, Ricky sigue fiel a sí mismo, la música es de calidad, la producción es buena y el conjunto global del producto funciona.
El vídeo cumple el propósito, más está claro que no se le puede pedir, podríamos decir que es pulcro, con la colaboración de Raymond Naval y es atractivo de ver.
Al final tener éxito también es hacer lo que a uno le gusta y con lo que uno esté satisfecho. Y desde luego Ricky puede estar más que satisfecho de los 3 singles que ha lanzado. Ya en el cuarto single cerramos la cuadratura del círculo, y nos marcamos un Take Me Home tipo Sophie Ellis-Bextor o Cher y todos contentos.
