Shakira y Jennifer Lopez siguen batiendo récords con su intermedio de la Super Bowl LIV. Considerado ya unánimemente como un auténtico éxito, lo último es que el vídeo de la actuación completa del Halftime, acaba de superar los 100 millones de visualizaciones en YouTube. Nunca un vídeo de una actuación de la Super Bowl había alcanzado semejante repercusión.
El vídeo ha calado de tal manera, que sobre todo los movimientos de baile de Shakira comienzan a ser imitados, y en concreto el baile de la Champeta, que ahora tiene un Challenge que ya es viral. La propia cantante colombiana agradecía en las redes el mapalé, la champeta, la salsa y los ritmos afro caribeños.
El éxito además no solo se ha quedado en YouTube. El catálogo de ambas cantantes desde el evento del domingo ha sumado 31.1 millones de reproducciones en streaming, audio y vídeo para el 2 y 3 de febrero en los Estados Unidos, un 193% más que los dos días anteriores, el 31 de enero y el 1 de febrero, donde apenas movieron 10.6 millones, en los reportes de Nielsen.
Jennifer Lopez hizo 10.1 millones el 2 y 3 de febrero y Shakira nada más y nada menos que 20.98 millones. De esos más de 30 millones, las canciones que aparecieron en el setlist de la Super Bowl reprensetan 24.85 millones. La canción que acaparó el mayor número de streams fue Hips don’t lie de Shakira con 3.16 millones.
Aunque ahora han bajado Shakira durante 3 días mantuvo 4 canciones dentro del top 10 de iTunes USA con Whenever wherever liderando. Hoy jueves, cuatro días después del evento, Whenever wherever es todavía #4.
Las comparaciones son odiosas, en la Super Bowl de 2019 el show de Maroon 5 apenas movió 14 millones de visualizaciones, el de Justin Timberlake de 2018, movió 33 millones, 16 millones en el canal de la NFL y 17 en el de Justin Timberlake. El de Lady Gaga de 2017 sí hizo unos números más acordes, 62 millones. En 2016 Coldplay, Beyoncé y Bruno Mars alcanzaron los 46 millones y en 2015 en uno de los shows de los más recordados, el de Katy Perry tuvo 23 millones, aunque sigue siendo el más visto de la historia con 118.5 millones en audiencia, incluso más que el propio partido, que tuvo 114 millones.