Ha fallecido en Ocata, Florida, la leyenda del country, Mel Tillis. El cantante y compositor fue uno de los artistas de mayor impacto en los años 70 en el mundo del country y del llamado outlaw country. Recibió todos los premios a los que un artista de sus características puede optar, coronado por la medalla Nacional de las Artes americanas, que le entregó el Presidente Barack Obama en febrero de 2012. Tillis llevaba ya una temporada enfermo.
Nació en Tampa, Florida el 8 de agosto de 1932, aunque creció en Pahokee, Florida. Aprendió a tocar la guitarra y la batería y llegó a ir a la Universidad de Florida, pero se marchó al ejercito americano, llegando a formar su primera banda estando en Okinawa.
Después de dejar la fuerza aérea en 1955 y tras trabajar en muchos sitios, uno de ellos el ferrocarril, esto le permitió ir con frecuencia a Nashville e hizo una audición con Wesley Rose. Comenzó primero como compositor con un éxito en 1957 para Webb Pierce I’m tired, que fue #3 en las listas de country. Después de otros éxitos consiguió que en 1958 la Columbia Records le firmara un contrato como artista.
Y en 1958 consiguió su primer éxito mediano como artista al hacer top 40 con The violet and a rose. Siguió de todas maneras como compositor con temas como I Ain’t never, que años después llevaría él mismo al éxito. Sin embargo a pesar de otros éxitos medianos, hasta que no cambió a la Kapp Records en 1965, no comenzó a oler los primeros puestos de la listas, con Wine que fue top 15.
Tillis escribió en esos años uno de los grandes clásicos de Kenny Rogers cuando estaba con First Edition, Ruby don’t take your love to town. Por fin en 1968 consiguió su primer top 10 como artista con Who’s Julie.
Sin embargo el final de la década de los 60 con dos top 10 más de manera consecutiva These Lonely Hands of Mine y She’ll Be Hanging Around Somewhere, anticiparía su explosión en los años 70. Trabajando con MGM Records, después de varios top 10 a principios de década como Heaven everyday, Commercial affection, Arms of a fool o Take my hand, en 1972 consiguió su primer #1 con su propia versión de I Ain’t never.
A partir de ahí el éxito ya fue continuado Neon Rose #3, Sawmill #2, Midnight, Me and the Blues #2 todos ellos en 1973 y en 1974 Stopm Them Grapes #3 y Memory Maker #3.
En 1975 Woman in the Back of My Mind #4, y en 1976 Mental Revenge #15. Pero con todo lo mejor llegó cuando volvió a cambiar de discográfica, al pasarse a la MCA Records, en 1976 Good Woman Blues y Heart Healer fueron #1. El éxito sin interrupción le permitió en 1976 el premio máximo de la CMA, Entertainer of the Year, y además ingresó en el Nashville Songwriters Hall of Fame.
Siguió con su éxito, en 1978 #1 con I Believe In You y en 1979 otro #1 con Coca-Cola Cowboy, que además fue incluida en la película de Clint Eastwood, Every Which Way but Loose, en una banda sonora de enorme éxito en ventas en los Estados Unidos.
En 1978 presentó un programa en la ABC Mel and Susan Together con la modelo Susan Anton. El artista estaba en lo más alto de su popularidad. Elektra Records lo ficha a finales de los 70 y Blind In Love #6 y Lying Time Again #6 le mantienen en los primeros puestos.
El cambio de década es bueno para él con éxitos como Your Body Is an Outlaw #3, Steppin’ Out #9 y e que sería su último #1, Southern Rains en 1981. Sin embargo a partir de ahí, salvo algún éxito suelto, desapareció de los primeros puestos. El country había cambiado, por un lado llegaba el country pop y por el otro los nuevos tradicionalistas, el country cambiaba, se actualizaba, y muchos de los artistas, entre ellos Mel Tillis, de éxito en los 70, pasaron a un segundo plano.
Su último top 10 New Patches llegaría en 1984, sin embargo el éxito no le hacía falta en absoluto, durante sus mejores años supo invertir el dinero en un imperio financiero invirtiendo en compañías de derechos, fue actor ocasional, adquirió un emisora de radio en Amarillo, Texas, que luego vendería por más dinero del que invirtió y otros negocios que le hicieron tener siempre buena salud financiera. Además cuando dejó de tener éxito en los 80 volvió a escribir para otros como Ricky Skaggs y Randy Travis.
El 9 de junio de 2007 el Grand Ole Opry lo homenajeó al ingresar, siendo apadrinado por su hija, Pam Tillis, cantante femenina también de enorme éxito, sobre todo en los años 90.