Se han entregado los American Music Awards, en el Microsoft Theater en Los Ángeles, California, Bruno Mars ha sido el indiscutible ganador de la gala con 7 premios de los 8 a los que ooptaba. Después de más de 30 años de ver entregas de premios, el hartazgo es la tónica habitual en estas entregas, convertidas desde hace años en mini conciertos, donde lo que menos importa son los premios. Bruno Mars ganó, porque viendo las categorías y nominados, no podía hacer otra cosa.
No hay que restarle mérito a Mars, ha sido uno de los grandes triunfadores de los últimos 12 meses, pero no el único, que es lo que dan a entender estos premios. Pero como decimos, tal y como estaban puestas las categorías y nominaciones, casi no había otra opción.
Un año más los premios creados por Dick Clark a principios de los 70, porque la ABC perdió en su momento los derechos de televisión de los Grammy, dejan la sensación de que no ganan objetivamente los mejores. Y cuando decimos los mejores, no nos referimos a los mejores discos, que normalmente ni siquiera están nominados, sino que ya no ganan ni siquiera los más populares del año, premiándose incluso a artistas que llevan año y medio sin lanzar un álbum. La palma en esto de todas maneras se la llevan los MTV Europe Music Awards, que este año premiaron a Eminem, simplemente porque pasaba por allí, tras cuatro años sin publicar álbum.
El problema de los AMAs no viene de los premios en sí mismos, sino de decidir las nominaciones y que luego se vote. Sí, históricamente son premios de voto popular, antes en papel en una gran cartulina y ahora online y redes sociales. Los AMAs limitan el impacto de los fans o mal llamadas Armys de artistas, eligiendo primero sobre qué se vota, y ahí comienza el despropósito.
Bruno Mars se llevó a su casa 7 premios y eso que ni actuó, ni estuvo presente. Los premios comenzaron con el Everybody hurts de Kelly Clarkson y Pink, en homenaje a todos los desastres ocurridos en los últimos meses. Fue un bonito comienzo. Luego Demi Lovato con Sorry not sorry, ¿cuántas veces hemos visto a Demi Lovato actuar con esta canción en los últimos dos meses? Hemos perdido la cuenta, pero nos sigue gustando.
Hubo nada más y nada menos que 17 actuaciones musicales, es decir llegará un año en el que ni se entreguen premios en directo. De las actuaciones más destacadas Hailee Steinfeld, Alesso, Florida Georgia Line y watt con Let me go, Selena Gomez y su primera aparición desde su operación, de rubia platino, para cantar Wolves junto a Marshmello.
Christina Aguilera hizo un medley de The Bodyguard de Whitney Houston, en el 25 aniversario de la película y la BSO de casi 8 minutos. Lady Gaga, que ganó el premio a la mejor artista de pop-rock, actuó con The cure desde su gira y agradeció el premio a sus fans. BTS hicieron su debut entre gritos histéricos en una gala americana, con DNA y Diana Ross cerró la gala con su medley de éxitos, en su merecidísimo premio a toda su carrera.
¿Y los premios? Pues Bruno Mars ganó 7 de los 8 a los que estaba nominado, pero también triunfó Despacito, habrá que ver si esto es antesala de los Grammy o no, el 28 de noviembre salen las nominaciones. La canción del año junto al Shape of you de Ed Sheeran se llevó dos premios. Keith Urban arrasó en los de Country con tres premios y Carrie Underwood por fin ganó a Miranda Lambert el premio de artista femenina de country.
Ed Sheeran que solo tiene este año el álbum del año con casi 8 millones de copias vendidas de Divide no ganó nada, teniendo en cuenta que su álbum ni siquiera estaba nominado en la categoría de mejor álbum de pop-rock, donde estaban nominados Bruno Mars, Drake y The Weeknd, solo esa categoría ya de idea del despropósito de los premios y categorías.
Claro que nominar a Imagine Dragons en la misma categoría que a The Chainsmokers, como Pop-rock tampoco tiene precio. Como lo de que Niall Horan, ex-componente de One Direction, ganara el premio al mejor nuevo artista, y que el año pasado lo ganara su ex-compañero Zayn. La manía que se ha instalado en las entregas de premios de premiar en esta categoría, a artistas que pertenecían antes a grupos y llevan años en la música, y no premiar a los verdaderos nuevos artistas, es de estudio. Claro que teniendo el antecedente escandaloso de los Grammy de 1987, cuando Jody Watley ganó el premio, después de llevar cantando 10 años con Shalamar, en fin, que es lo que hay. Ya solo nos queda esperar al despropósito en unos días, de las nominaciones de los Grammy.
Lista completa de ganadores de los American Music Awards