Hoy, John Winston Lennon, habría cumplido 76 años, cuando están a punto de cumplirse los 36 años de su asesinato, su legado sigue estando vigente. Se fue en el momento en el que saboreaba de nuevo las mieles del éxito, en un punto a sus 40 años, en el que relajado y confiado, había dejado atrás el pasado turbulento, y vivía en Nueva York con Yoko.
Cuando también hace unos días, los Beatles volvían a las listas a los primeros puestos, con su directo del Hollywood Bowl, y a los cines con el estreno del documental Eight days a week. The touring years, cobra más fuerza, que hubiera pasado si hubiera seguido vivo. ¿Habría seguido la comercial carrera de Paul? ¿Habría hecho duetos? ¿Habría seguido sacando discos fabulosos? Las respuestas nunca las sabremos, así como tampoco si los Beatles se hubieran vuelto a reunir. Se habló incluso a mediados de los 80, que quizás con Julian Lennon, su hijo, se pudiera volver a reunir el grupo, otras grandes bandas lo han hecho, como Led Zeppelin, pero Paul lo tenía muy claro, sin John, no existen los Beatles. Lógico.
Las canciones de los Beatles, en su inmensa mayoría, siempre iban firmadas por el tándem Lennon-McCartney, hasta 1969 cuando se publicó Something de George Harrison, ningún single llevaba otra marca, que no fuera la del tándem. Siempre se sabía de quién era quien. Las de Lennon, eran siempre más arriesgadas que las de Paul, siempre más comercial, y más «blando«. Lennon en solitario, no tuvo el éxito de Paul, incluso en un momento, George Harrison tuvo más que los dos, de hecho el primer #1 de un ex-beatle, fue My sweet lord de George Harrison, en 1970, aunque también es verdad, que copió la canción a las Chiffons. Su He’s so fine de 1963, es básicamente My sweet lord, pero como diría alguien una vez, el poder de ser un Beatle, no pasó nada, el plagio era uno de los más descarados que ha habido en la historia de la música.
Pues como decíamos, Lennon, no siguió la carrera de Paul, siguió la suya propia, la que él creía, y la que se marcaba con Yoko. Que por cierto, no fue la única culpable de que se separaran los Beatles, los Beatles ya estaban heridos de muerte bastante antes, probablemente desde la muerte de su mánager Brian Epstein en agosto de 1967, aunque ellos ni lo supieran. Es muy difícil de digerir el éxito, de un grupo que básicamente todo lo que publicaba era #1. No hay en la historia reciente del rock, salvo la época de Elvis Presley en los 50 y principios de los 60, los Bee Gees en un par o tres de años a finales de los 70 y los momentos puntuales de Michael Jackson, nadie que haya arrasado de tal manera como los Beatles y todo en apenas 8 años.
Muchos artistas se han mantenido con buena nota, como los Rolling, U2, carreras como las de Stevie Wonder, Madonna, pero nadie, nadie con el nivel de #1’s consecutivos de los cuatro de Liverpool. Sus 20 #1’s en Estados Unidos (1964-1970), son un récord complicado de batir, han pasado ya 46 años, y nadie lo ha conseguido. Aunque quien sabe en la era del streaming.
Lennon en solitario, comenzó estando todavía con los Beatles, en 1968, el 29 de noviembre, publicó Unfinished music #1: Two virgins, con Yoko, la famosa portada de los dos desnudos. Era un disco experimental. Todavía John estaba con Cynthia. En mayo de 1969, publicó el segundo de los discos experimentales, que se subtitulaba, Life with the lions, y el tercero vino en noviembre de 1969, The wedding album. Ninguno de los tres vendió de manera significativa. Sin embargo si triunfaron los singles, que fue sacando de manera suelta, como Give peace a chance, #2 en UK y #14 en USA, en 1969, o Instant karma! #3 en USA y #5 en UK. Todos firmados como Plastic Ono Band y Lennon/Ono Plastic Ono Band.
Entre medias, también publicó un directo, el primero que publicaba cualquier miembro del grupo, o el grupo, Live peace in Toronto 1969, fue un éxito en Estados Unidos. El 11 de diciembre de 1970, ya con el grupo disuelto, sí que Lennon publica ya John Lennon/Plastic Ono Band, su primer disco real, top 10 en USA y UK y con temas como Mother, Working class hero o Love. En este disco colaboraban entre otros Phil Spector y Billy Preston. Tanto Time como Rolling Stone, han colocado este disco como uno de los mejores de la historia.
La publicación en septiembre de 1971 del disco Imagine y del single Imagine, creó uno de esos momentos mágicos, que todo músico quiere tener alguna vez en su vida, Lennon consiguió el #1 en las listas de álbumes y en singles #3 en USA. En UK fue #1 ya póstumo. Después de publicar otro de los grandes clásicos navideños, de la historia, Happy xams (War is over), Lennon volvió al éxito con Mind games en 1973.
En 1974 publicaba Walls and bridges y conseguía un #1 raro en los Estados Unidos, con la canción Whatever gets you thru the night, que solo fue éxito en USA. Fue su primer #1 en USA, y de hecho fue el último Beatle en conseguir tener su primer #1 en los Estados Unidos. En la canción las voces y el piano corrían a cargo de Elton John, algo clave para que el tema fuera #1.
Y luego en 1975 publicó Rock and roll, su revisión de grandes éxitos del rock, donde sobresalía la enorme versión de Stand by me.
De ahí, hasta el 17 de noviembre de 1980, nada, eso sí, líos, persecuciones de la policía y el FBI en los Estados Unidos, para deportarlo, hasta que finalmente consiguió su green card, cuidar de Sean, que nació en 1975 precisamente un 9 de octubre, tranquilidad. Pero regresó en 1980, Double fantasy es un disco enorme, enorme. Fue el último disco que publicó en vida y contenía temas como (Just like) starting over y Woman, que fueron #1, ya póstumamente, incluso en UK conseguiría el raro hito, de conseguir 3 #1’s de manera consecutiva, al añadir Imagine a la nómina en 1981, que fue reeditado después de su muerte. Sin embargo, el disco funcionó de manera normal hasta su muerte, aunque sus ventas lógicamente explotaron después, era un buen regreso, pero no fue #1 hasta su muerte.
Ganó el disco del año en los Grammy de 1981. La cantidad de canciones que grabó para el proyecto le dieron la oportunidad a Yoko, de publicar en 1984, Milk and honey, que se vendió bastante bien. Hoy volvemos a recordar a Lennon, como siempre hacemos un 9 de octubre y aquel fatídico 8 de diciembre, porque su legado sigue estando muy vivo.
Vinilo Negro