Se ha celebrado una nueva edición de los Premios Brit, el equivalente británico a los Grammy, desde el O2 en Londres. Aunque las comparaciones son odiosas, los Brit tienen dos cosas en las que superan a los Grammy, la primera es el formato, mucho más ágil, que les permite presentar todos los premios que entregan, aunque bien es verdad que en los Grammy eso es imposible, pero en los Brits la ceremonia dura una hora menos. Apenas 2 horas y cuarto, que se agradece, y luego, que son unos premios mucho más centrados en la actualidad, al entrar lo que mejor ha pasado en el año 2015. Los Grammy terminan su período de poder ser seleccionado el 30 de septiembre, circunstancia, por la que en los Grammy de hace unos días, no estaban Coldplay, Justin Bieber y sobre todo Adele, y sí han estado en los Brits.
El espectáculo, por otro lado, en un imponente O2 Arena, ha sido Adele, que ha ganado 4 premios, y no ha ganado el quinto, por el voto del público, que ha otorgado el premio al vídeo del año a One Direction, algo cantado, ya que las fans se han movilizado y era por voto popular. Adele ha ganado el premio al mejor álbum y a la mejor canción, además del premio a la mejor cantante femenina, y el premio Global Success.
El resto de premios ha estado completamente repartido, con alguna que otra sorpresa, como en el premio al mejor artista novel, que ha recaído en Catfish & The Bottlemen, cuando los favoritos de largo eran James Bay o Jess Glynne. Bay sí ha ganado el premio al artista masculino mientras que Coldplay también ha ganado el de mejor grupo británico, algo más o menos cantado, justo hace quince años, ganaron su primer Brit.
El premio de la crítica también estaba cantado y se lo llevó Jack Garratt, el productor fue Charlie Andrew y en los premios internacionales, a nivel masculino, ganó bien Justin Bieber, aunque era complicado con Drake, Kendrick Lamar y The Weeknd en la pomada, mejor grupo internacional, ligera sorpresa con Tame Impala y sorpresón en la artista femenina internacional, donde las claras favoritas eran Lana del Rey y Meghan Trainor y ganó sorpresivamente Björk.
Hablando de actuaciones, todo comenzó con la de Coldplay, Hymn for the weekend, siguiendo con Justin Bieber que hizo un medley entre Sorry y Love yourself, Jess Glynne también hizo un medley de Ain’t Got Far To Go, Don’t Be So Hard On Yourself y Hold My Hand. James Bay tocó su ya clásico Hold back the river. Rihanna actuó con Drake y su tema Work, hasta la espectacular actuación de Little Mix con Black magic.
Luego llegó el momento emotivo de la noche, con el O2 puesto en pie para recibir a Annie Lennox que presentó el Icon Award a David Bowie, que recogió el actor Gary Oldman, buen amigo de Bowie. Los dos destacaron la estatura del artista fallecido el pasado 10 de enero, glosando una de las carreras más importantes de la historia de la música. Después de un medley instrumental con temas del cantante, Lorde interpretó Life on Mars, con el O2 todavía en pie.
The Weeknd actuó con The Hills y Adele, cerró con una magnífica interpretación de When we were young, su segundo single de 25. Y sin más terminó como estaba previsto, con el triunfo incontestable con la que hoy por hoy, es la artista más importante del mundo, la británica Adele. 2 horas y cuarto, que aprendan los americanos, no hace falta más.
Vinilo Negro