Desde que en casi todos los bolsillos hay smartphones, podría pensarse que los teléfonos fijos están sentenciados a muerte, pero las cifras de ventas lo contradicen: se siguen comprando en todo el mundo millones de teléfonos fijos tanto inalámbricos como con cable.
«La gente joven y los hogares de una o dos personas cada vez tienen menos teléfonos fijos, es cierto«, señala Roland Stehle, portavoz de la Sociedad de Promoción de la Tecnología de Entretenimiento (gfu) en Alemania. «Pero básicamente el teléfono fijo sigue siendo un aparato utilizado y comprado«.
Además, al existir desde hace años en formato inalámbrico, los aparatos son muy modernos. En el último análisis hecho por la asociación de consumidores Stiftung Warentest, 11 de los 16 teléfonos probados fueron calificados de «buenos» y el resto de «satisfactorios«.
No es difícil, por tanto, acertar a la hora de comprar un teléfono para el hogar, sino que únicamente hay que reflexionar sobre lo que se quiere que haga el aparato. Hay un par de siglas importantes: DECT significa Digital Enhanced Cordless Communication (Comunicación Inalámbrica Digital Mejorada) y es el estándar tecnológico actual para la telefonía inalámbrica.
Otra abreviatura habitual es VozIP (Voice over IP, Voz por IP), que significa que las conversaciones no se mantienen de forma analógica por la línea telefónica clásica, sino digital, a través de Internet. En muchos proveedores esto ya es habitual.
«Como consumidor no noto la diferencia«, dice Falko Hansen, del portal de telecomunicaciones «Teltarif.de«. «Está preconfigurado en el router y para el teléfono la forma de transmisión da igual«. Sin embargo, se supone que la transmisión vía VozIP puede dar más problemas, porque si se cae Internet, tampoco funciona la línea telefónica. Por eso, depende mucho de cada país y del funcionamiento de su red.
Como contrapartida, VozIP permite en teoría una transmisión de mayor calidad. Algunos fabricantes incluso se promocionan afirmando que pueden conectar en calidad HD, y las asociaciones de consumidores confirman que, en efecto, las conversaciones telefónicas de esos modelos suenan mejor. Pero es necesario que el proveedor de telefonía soporte esa misma calidad, y también tienen que emitir en HD tanto los routers como los teléfonos de ambos interlocutores.
Otras características son ya habituales a casi todos los aparatos, como conferencias a tres, llamadas en espera y el contestador automático integrado. En los últimos modelos también hay un modo eco, que reduce de forma variable el uso tanto de ondas como de electricidad. Por ejemplo, quien se siente cerca de la base para hablar tampoco necesita que el aparato emita a su máxima capacidad inalámbrica. En algunos teléfonos, el modo eco hace que el aparato no emita ondas mientras está en la base.
Otros fabricantes se promocionan con prestaciones originales. «Por ejemplo, pantallas de colores o gran capacidad de almacenamiento de números«, señala Roland Stehle. También hay algunos de diseño con forma circular o de bola. «Hay formas muy excéntricas«, a veces incluso un poco incómodas, opina la asociación Stiftung Warentest.
Otra tendencia importante son los teléfonos diseñados para personas mayores, explica Stehle. Por ejemplo, aparatos que se acoplan con los audífonos, que tienen teclas grandes o un botón de emergencia. Otros modelos se pueden usar como walkie-takies para bebés (o vigilabebés). El teléfono inalámbrico se coloca en la habitación del niño y suena cuando éste llora.
Dpa/Vinilo Negro