La música sigue sin levantar cabeza a pesar del streaming, si hace unos días conocíamos que en Alemania, había crecido un 6% la música, gracias al streaming, según los datos de la RIAA, conocidos ayer, no parece lo mismo en los Estados Unidos, donde 2015 es más una línea plana que otra cosa.
Las cifras hablan de unos beneficios totales que han bajado un 0.5%. El sector digital sigue creciendo, aunque la línea no es lo ascendente que todos desearían, ya que solo sube un 6,3%. Pero la cifra es engañosa, ya que al igual que veíamos en el caso de Alemania, en Estados Unidos, el streaming ha crecido un 23,2%.
Los singles digitales han bajado un 9,4% mientras que los álbumes digitales crecen un 4,2%. Las ventas físicas, siguen por otra parte su caída, esta vez un 17,3% en el primer semestre de 2015. El CD se ha desplomado de una manera impresionante, hasta un 31,5 en este primer semestre. Las ventas en vinilo, constinúan su tendencia alcista de los últimos años, con un 51,3%.
Las suscripciones de pago, de servicios como Spotify y Pandora, han crecido ese 23,2% como veíamos y eso ha posibilitado que la publiciad en esos servicios, crezca un 27,1%.
Sin embargo, surge aquí la misma duda que en Alemania, cómo han de interpretarse los datos de los servicios de suscripción? Ahora mismo hay en Estados Unidos 8,1 millones de suscriptores de pago, pero solo 200.000 nuevos, en el último semestre.
De hecho, las diferencias entre las ofertes que hay, dificulta saber por ejemplo, cuanto tiempo está de media un suscriptor, en los servicios. Y sobre todo, altera el beneficio final, un ejemplo es la oferta de Spotify, de 3 meses de suscripción por un dólar.
Los datos de Apple Music, no están contabilizados en este estudio, ya que se lanzó el 30 de junio, pero por ejemplo, ofrecía 3 meses gratis, lo que también alteraría, el beneficio real, de unos suscriptores contabilizados, pero cuyo gasto es 0.
Vinilo Negro